El 11 de septiembre se conmemora en nuestro país el Día del Maestro en recuerdo de Domingo F. Sarmiento. Desde EL CANILLITA queremos destacar la vida y obra del padre del aula como hombre y como prócer.
Nota recuperada de la versión impresa de Revista El Canillita – Septiembre 2014
Es sumamente difícil resumir la vida y obra de Domingo Faustino Sarmiento, pero trataremos de acercamos al niño, escritor, estadista, militar, viajero, intelectual, prócer incómodo, tan alabado como discutido. Para unos demócrata, para otros conservador, desbocado, sincero, educador y soberbio, con un ojo en la patria y el otro mirando a Europa. Sarmiento y sus múltiples vidas representan las contradicciones de su tiempo
ENTRE TELARES, PONCHOS Y LIBROS
En una casa ubicada en el antiguo barrio del Carrascal en la ciudad de San Juan, comenzó la historia. Allí nació Faustino Valentín Sarmiento – luego le antepusieron “Domingo” en honor del santo protector de su familia – el 15 de febrero de 1811. Sus padres fueron José Clemente Sarmiento Funes y Paula Albarracín, quienes tuvieron 15 hijos de los cuales sólo vivieron 6. El pequeño niño Domingo se crío entre telares, ya que el sostenimiento económico de la familia estaba a cargo de su madre

En su casa había una higuera, junto a ella su madre Paula instaló el telar con el que mantenía a sus hijos. Sarmiento describió esa casa donde vivió en “Recuerdos de Provincia”. Él reconoció haberse criado casi en la indigencia, era – según el propio Sarmiento – un hogar con virtudes de austeridad, amor al trabajo y disciplina cordial. De su madre, aprendió el deber y el cuidado de las tradiciones. Mientas que su padre José Clemente Sarmiento y su tío José Eufrasio Quiroga Sarmiento, le enseñaron a leer a los cuatro años.

SUS FORMADORES
Para Sarmiento su madre fue un verdadero ejemplo de amor, abnegación y virtud. Ella sembró en él la dignidad, el respeto y los educó con los lazos de la familia. Su padre fue un hombre sin profesión, pero que se ocupó de su educación. José Clemente Sarmiento fue una figura clave para Domingo cuando combatió en las guerras por la Independencia: en 1812 acompañó a Belgrano a Tucumán y, en 1817, acompañó a San Martín a Chile.
SUS AMORES
De vuelta en Chile, en 1848, Sarmiento se casó con Benita Agustina Martínez Pastoriza, viuda de Domingo Castro y Calvo. Ella había nacido en San Juan pero muy jovencita fue entregada por sus padres a Castro y Calvo, un hombre mayor y de fortuna. Sarmiento se había enamorado de ella y cuando murió Castro, se casaron y él le dio su apellido al hijo de su esposa, Domingo Fidel (Dominguito) del que -según Natalio Botana- posiblemente era el padre. Sarmiento quería muchísimo a Dominguito y tras su muerte durante la Guerra de la Triple Aliaza, cayó en una depresión.
Como hombre, Sarmiento también tuvo sus amores. En Pocura (Chile) el 18 de julio de 1832 nació su hija Ana Faustina Sarmiento,
fruto de sus amores con una alumna, María del Jesús Canto. Allí fue minero en Copiapó y tomó contacto con el movimiento romántico
europeo. En 1835 se enfermó de fiebre tifoidea y volvió a San Juan en 1836.

TAN POLÉMICO COMO CUESTIONADO

Tal vez una de las más polémicas y muy cuestionadas frases de Sarmiento se sintetiza en el subtítulo de su libro más importante, Facundo. La expresión sintetizaba su pensamiento: “civilización y barbarie”.
La civilización era para Sarmiento la expansión de las ciudades, el desarrollo de las comunicaciones, el progreso del capitalismo, la
cultura europea, mientras que a la barbarie la situaba en el campo con sus costumbres atrasadas y las características de los gauchos y los indios, mezcladas con el atraso propiciado por la cultura y tradición hispánica. Por eso decimos que siempre estuvo con un ojo en la patria y el otro mirando a Europa..
Según relata el historiador Felipe Pigna, en una carta, le aconsejaba a Bartolomé Mitre: «No trate de economizar sangre de gauchos. Este es un abono que es preciso hacer útil al país. La sangre es lo único que tienen de seres humanos esos salvajes».
FORMACIÓN DE UN PRÓCER
• La fecha
El 11 de setiembre de 1888, en Asunción del Paraguay, murió Domingo Faustino Sarmiento. Cincuenta y cinco años después, en 1943, un grupo de pedagogos de América latina decidió que esa fecha era la más oportuna para homenajear a los maestros latinoamericanos. Desde entonces, el 11 de setiembre es del Día del Maestro para recordar a Sarmiento y reconocer y valorar la labor de todos los docentes
• Hitos
- A los quince años Sarmiento fundó una escuela en San Francisco del Monte, provincia de San Luis. Tiempo después se enroló como soldado para luchar contra los federales y tuvo que exiliarse en Chile, adonde se empleó como periodista y minero. De nuevo en San Juan, fundó el periódico El Zonda e inauguró un colegio para señoritas.
- En 1840 volvió exiliado a Chile, donde continuó su labor como periodista y participó en la fundación de la Facultad de Humanidades de ese país. Allí dirigió una escuela e inventó un método para enseñar a leer y escribir: el Método de lectura gradual.
- En 1852, cuando los federales dejaron el poder, retornó a la Argentina. En los años siguientes ocupó diversos cargos públicos: concejal municipal de Catedral al Norte (1856-1857), senador de la Legislatura (1857) y director del Departamento General de Escuelas. Fue gobernador de San Juan (1862-1864). Tras dejar la presidencia se convirtió en senador nacional.
- Entre 1868 y 1874, fue presidente de la República Argentina.
- Durante su gobernación de San Juan decretó de obligatoriedad la enseñanza primaria y fundó una escuela para más de mil alumnos.
- En el lapso de su presidencia fueron muchas las acciones destinadas a la educación: creó varias instituciones escolares primarias, secundarias y terciarias (el Colegio Militar, la Escuela Naval, las Escuelas Normales de Paraná y Concepción del Uruguay, y los Colegios Nacionales de Santa Fe, San Luis, Santiago del Estero, Corrientes y Rosario). Fundó un sistema de bibliotecas populares, impulsó la construcción del Observatorio Astronómico de Córdoba y la Academia de Ciencias de esa provincia y organizó la Primera Exposición Nacional en la ciudad de Córdoba. Durante su mandato, la cantidad de alumnos primarios creció de 30.000 a 100.000.
- Para estos trabajos tuvo la colaboración de docentes argentinos y extranjeros, como Juana Manso, y Horace y Mary Mann.
HOMBRE, PRÓCER
Sarmiento escribió libros y manuales. Estudió la experiencia educativa de otros países y trajo maestras norteamericanas para que colaboraran en organizar un sistema moderno de educación. Puso sus esfuerzos en la enseñanza a mujeres para que tuvieran las mismas posibilidades que los varones. Además, pensó que la educación estatal no puede ser católica y buscó garantizar la libertad religiosa en las escuelas públicas.
Como ven, los actos de Sarmiento justifican que lo consideremos como un padre del aula. Sin embargo como hombre y ser humano también tuvo su temperamento y críticas hacia una parte de la sociedad que él consideraba una perdición: “los gauchos”. Por eso podemos dividir su historia como hombre y prócer argentino. Sarmiento también fue niño como ustedes, creció y en ese crecimiento varias personas fueron influyentes en su carácter. ¿Qué más sabés del prócer?
UNA VIDA EXTRAORDINARIA
• Obras literarias
En 1845, publicó en “El Progreso” -en forma de folletín-, “Civilización y Barbarie. Vida de Juan Facundo Quiroga y aspecto físico, costumbres y hábitos de la Rep. Argentina”. Se convirtió en su obra más popular.
• San Martín
En Gran Bourg, Francia, visitó al general José de San Martín en 1846.
• Atentado
El 22 de agosto de 1873 Sarmiento sufrió un atentado mientras se dirigía hacia la casa de Vélez Sarsfield. Cuando transitaba por la actual esquina de Corrientes y Maipú, una explosión sacudió al coche en el que viajaba. El sanjuanino no lo escuchó porque ya padecía una profunda sordera.